Bandi ha tenido un accidente automovilístico y se encuentra en un lugar que no sabe bien que es, una suerte de “no lugar” que hace las veces de antesala para poder pasar definitivamente a ese otro plano que no es la vida terrenal. Bandi espera, intenta comprender y en este “mientras tanto” se encuentra con una luz quien le solicita algunas cosas y a la que demanda respuestas, sin obtenerlas. Además, su celular, le permite conectarse con los “vivos”, tratando de encontrar también allí explicaciones de lo que le pasó, además de tratar de ordenar algunas cuestiones que dejó pendiente, enunciar sus últimos deseos y manifestar sus sentimientos a hacia algunas personas de su entorno cercano. Este unipersonal tiene las características de una comedia dramática, donde el gran tema de la muerte, y esa inquietud antropológica respecto a la misma se mezcla con un relato atravesado por el humor, dejando puertas abiertas a reflexiones en relación a la vida y la muerte.